Dos reclusas quedaron embarazadas tras tener sexo consensuado con una interna transgénero, en el Centro Correccional de Edna Mahan, la única cárcel de mujeres de Nueva Jersey (EE. UU.).
Tras conocerse el caso, se reavivó el debate sobre una ley, aprobada el año pasado, que permite a las personas condenadas guardar reclusión en penitenciarías, de acuerdo a su identidad de género. Fue luego de que una reclusa iniciara una demanda, porque la obligaron a estar 18 meses, en una cárcel de hombres.
Si bien las autoridades evitaron dar nombre, se supo que Demitrius Minor (27), quien cumple 30 años de prisión por el asesinato de su padre adoptivo, admitió que tuvo relaciones con otras dos presas, según medios internacionales.