Una denuncia de vecinos contra un supuesto motel clandestino, ubicado detrás mismo de la municipalidad, causó revuelo ayer en la tranquila Tobatí, ciudad de cerros y olerías.
Si bien los rumores sobre la casa son de hace varios años, hace dos meses se presentó la denuncia en el juzgado de faltas por parte de don Jorge Guzmán, que volvió hace poco a vivir ahí y fue el que más se molestó por la situación, y otros diez firmantes.
Según los vecinos, todo el tiempo hay movimientos sospechosos. A veces llegan parejas, pero también hombres y mujeres solas. Guzmán dijo que hay días en que suele ver a una veintena de personas entrar y salir, sobre todo en moto y a pie.
“A la noche hay menos movimiento, a la tarde es cuando hay más, creo que es porque las personas tienen sus compromisos, su familia, entonces en ese horario es que vienen”, refirió el lugareño.
La preocupación de los vecinos es que a solo una cuadra está un colegio, también la municipalidad y una iglesia.
Pedro Vera vive al lado de la casa, dijo que una vez le robaron sus gallinas y asegura que fueron los visitantes. Mencionó que todos los vecinos de la cuadra están cansados, pero que al dueño de la casa, un adulto mayor, no le importan para nada las quejas.
Magdalena Alcaraz, directora del colegio Pedro Juan Caballero, donde van unos 700 alumnos, dijo que como institución nunca estuvieron al tanto del tema, pero que ahora será algo más a tener en cuenta. “De hecho que siempre andamos preocupados por los estudiantes”, dijo.
Juzgado investiga
El intendente, Dan Alberto González, mencionó a EXTRA que el juez de Faltas Eduardo Navarro fue a verificar el lugar hace unas semanas y que no pudo entrar. “Si hay indicios de que hay algo ahí se va a recurrir a la justicia ordinaria”, refirió.
El dueño del domicilio sería conocido como “don Rubio”, que no se encontraba ayer en el lugar.