Con tres meses de embarazo, Milena Benítez ingresó al Buen Pastor. Poco después se enteró que un niño venía en camino y sería la parejita de su hija mayor. Aunque las condiciones estaban lejos de ser las mejores, soñaba con ropitas color celeste y suaves sábanas para su retoño.
A diferencia de cuando esperaba a su primogénita, que nadie le dio importancia, esta vez recibió una grata sorpresa, al igual que otras 17 mamis que fueron agasajadas con un Baby Shower en su lugar de reclusión.
El emotivo evento se realizó el domingo, dentro de la penitenciaría donde 18 mamis festejaron la próxima llegada de los bebés. Sin embargo, para cuatro de ellas, la cigüeña adelantó su vuelo e hizo la entrega en la semana, antes de la celebración. De igual modo, compartieron el festejo, que por primera vez se realizó en la cárcel de mujeres.
La organización estuvo a cargo de la Dirección de Atención a Grupos Vulnerables, la Dirección de Bienestar y Reinserción Social y el grupo “Bebé Showers Solidario”.
“Este acontecimiento vinimos planeando hace un mes, con el apoyo de algunas empresas. No solo consiste en realizar una merienda y dar regalos, sino dar ese apoyo que necesitan las mamás, y más en la situación que se encuentran las ahora agasajadas, con charlas y talleres sobre lactancia y crianza”, dijo Kelly Badgen, directora de Atención a Grupos Vulnerables.
Los integrantes de “Bebé Showers Solidario” se encargaron de recolectar los regalos, como ropitas, pañales, juguetes, entre otras cosas. Además de decorar el ambiente acorde al festejo, los alimentos para la merienda fueron donados por algunas empresas.
Información
“Más que dar regalos, el objetivo es darles información sobre lactancia, parto respetado y temas propios de la maternidad. Hacer sentir a las mamis que son importantes, tanto ellas como los bebés”, dijo Graciela Chera, coordinadora de logística. Además consiguieron más de 150 regalos.