Natalia Belén Sosa, así se llama la encantadora nena que tiene asombrados a todos a lo largo y ancho del quinto departamento.
Desde los 5 añitos, la niña comenzó a elegir la pelota como juguete favorito y ya no la soltó más. Con solo 9 años, juega al fútbol como los dioses. Su destreza, su fuerza y su talento con el balón hizo que hoy por hoy la conozcan como “la zurda de oro de Caaguazú”.
Pero tanta magia en sus pies viene de la familia. “Empezó practicando conmigo, yo soy futbolista, estuve en la selección de Curuguaty, de Caaguazú y en varios clubes”, comenzó explicando a EXTRA su mamá, Blanca Sosa.
Nati fue perfeccionando su juego en la escuela de fútbol del club 8 de diciembre. “Allí ella practicaba con los varones, es la única niña. Antes de la pandemia me pidieron su pase para el club Atlético Caaguazú, pero todavía no se dio”, agregó.
Blanca comentó que su hija es bastante dedicada al deporte rey, tanto que incluso practica con ella en una canchita cerca de la casa. “Le gusta hacer picaditas, remates, de todo. Está todo el día con su pelota, aprende de los grandes, incluso juega piki a veces con nosotros”, mencionó.
Admirada
Pero su amor por el balón no hace que se distraiga con la escuela, cursa el tercer grado y es una excelente alumna. “La gente se queda sorprendida con mi hija, se me pide mucho por ella para jugar, pero la cuido para que no se lesione, ya que ella quiere ser profesional cuando sea grande”, expresó.
Enseñanza
Además de técnica, Blanca le da unos tips para ser una buena jugadora. “Le enseño valores. Lo que más le digo es que debe saber ganar y saber perder y sobre todo a ser humilde”, concluyó orgullosa. Nati prometió tener mucha disciplina para llegar a ser una gran promesa en el fútbol femenino.