“Hasta esta mañana (por ayer) seguíamos encontrando algunos gatitos lastimados, con las patas quemadas, que se refugiaron en los yuyales cercanos”, contó Raquel Flores, dueña del refugio Belén, que fue consumido por el fuego en la noche del sábado.
Unos 170 gatitos vivían en el albergue, de los cuales más de 80 terminaron calcinados y asfixiados. Sin embargo, se sigue contabilizando la cantidad exacta de mascotas que murieron. “Desde el sábado estamos sin dormir. Las personas nos llaman y nos dicen que en tal patio baldío hay gatitos lastimados, nos vamos y los encontramos heridos, con las patas quemadas”, relató la afectada.
“No puedo asegurar, pero hay gente que se acercó a mí y me dijo que el incendio fue provocado. A varios vecinos no les gusta que recoja a los michis, inclusive algunos tiraron frente a casa a los gatos. Hace poco tiraron 11 gatitos en una bolsa”, dijo ña Raquel.
Con el afán de salvar a los felinos, su marido quedó con quemaduras en la cara y los brazos.El siniestro no solo afectó a los animales, sino también a personas humildes que encontraban en el lugar comida, abrigo y, sobre todo, un hogar.
“Este refugio ayudaba a los más necesitados. Donábamos sillas de ruedas, medicamentos, ropas, frazadas y alimentos; asistíamos a jóvenes y adultos mayores víctimas de maltrato. Ahora nos toca pedir ayuda a la gente para volver a ayudar”, finalizó.
Animaleros piden donaciones
A través de las redes sociales, los amantes de los animales solicitaron ayuda de la ciudadanía para solventar los gastos que conlleva asistir a los felinos que se salvaron. Necesitan camitas para los gatos, mantas, materiales eléctricos y de construcción, artículos de limpieza y balanceados. Para colaborar con ellos, llamar al (0984) 867 521.