En septiembre de 2016, Genaro Mora Samudio (48) había sido denunciado por abusar de su sobrinito de 3 años, en un asentamiento de la colonia Maracamoa, de Santa Fe del Paraná (Alto Paraná).
El caso saltó a la luz cuando el papá del pequeño, quien residía en el asentamiento campesino Santiago Martínez, en el mismo distrito, fue a visitarlo, ya que el menor de edad vivía con la madre.
Según el hombre, su hijo le contó que su tío lo había manoseado en sus partes íntimas y hasta presentó una grabación de lo que le había dicho el niño.
La Policía de la zona detuvo al sospechoso, pero el fiscal del caso lo liberó al día siguiente, porque no halló suficientes elementos para mantenerlo preso.
El informe médico señaló en su momento que no existió relación sexual en el supuesto hecho. Pero el proceso, ya iniciado, tuvo que continuar su curso.
Más de cuatro años después, el juicio oral y público se llevó a cabo el lunes, en el Día de los Inocentes, durante el cual el Tribunal de Sentencia de Alto Paraná, integrado por los jueces Milciades Ovelar (presidente), Marino Méndez y Flavia Lorena Recalde (miembros), declaró inocente al procesado.
Pedido fiscal
El fiscal del caso, Alfredo Acosta Heyn, de la Unidad Zonal de Hernandarias, había pedido la liberación del encausado, ya que en el curso de la investigación, pudo comprobar que el mismo había sido víctima de una venganza. Al parecer, el hombre descubrió a dirigentes del asentamiento pidiendo plata a los ocupantes.
La propia mamá del pequeño, quien en un principio apoyó la denuncia, admitió en el juicio que todo fue un engaño y que su exconcubino ya le pidió perdón, a ella y a su exsuegra, por la falsedad del caso.
Buscan a depravado
Un hombre de 33 años fue denunciado por abusar de su hijastra, desde que ella tenía 10 años de edad.
La supuesta víctima tiene ahora 16 años y le había contado a una tía suya que era sometida desde hace tiempo, por la pareja de su mamá, quien aparentemente tenía conocimiento de lo que ocurría, pero no hacía nada para protegerla.
La víctima tampoco contaba nada, por temor, ya que era amenazada por el presunto pedófilo, de acuerdo a los datos.
La Policía de Minga Guazú (Alto Paraná) está buscando al padrastro, mientras que la fiscala Vanesa Candia se encuentra a cargo del caso.