El compatriota Luis Fernando López Núñez (21), de Tembiaporã (Caaguazú), vivió toda una odisea al perderse en San Pablo (Brasil) y aparecer 11 días después, tras recorrer 340 kilómetros.
Hacía dos meses que se fue al vecino país, a la casa de su tío Raúl Aguilera López (45), un primo de su papá. El domingo 11 de octubre participó de un paseo a Playa Grande con unos 30 paraguayos residentes, entre ellos varios jóvenes.
“Le regalaron nomás luego el pasaje y se fue”, contó su padre en comunicación con EXTRA.
Estando ya en la playa, “se fue al baño y al volver ya se desatinó; ya no sabía hacia dónde ir”, dijo en guaraní el señor, quien quiere aclarar el caso al regresar Luis Fernando, porque cree que pudo ser “algo tramado”, como una especie de broma pesada, porque ya no pudo encontrar a sus acompañantes. “Le abandonaron sus amigos”, sostuvo.
Como no habla el portugués, además de asustarse, se generó una confusión entre la calle Santa Rita do Passa Quatro, en Jardín Brasil, donde vive su tío, con la ciudad del mismo nombre, en el interior del Estado, donde fue a parar en colectivo.
Llegó a caminar unos 65 kilómetros descalzo, por lo que se lastimó los pies y fue atendido en un centro de salud.
Su tío lo traerá de vuelta a su casa esta semana, contó el padre.
Según el abogado Felipe Ortellado, las personas escrachadas pueden accionar legalmente, en el caso de que no haya ningún documento que confirme la deuda existente. “Veo que una de las personas publica y ofende al compararlo con un animal (rata), y luego lo trata de cornudo, son cosas innecesarias que podría dar pie para demandar por difamación y calumnia”, dijo el abogado.
Paraguayo vive de la caridad y quiere volver
El paraguayo José María Benítez (39) quedó varado por la pandemia en la ciudad de Las Heras, provincia de Santa Cruz, en la patagonia argentina, adonde había ido a trabajar como pintor, pero ya no puede conseguir empleo. Dijo que muchos compatriotas están viviendo de la caridad y pasando hambre en la zona. Ya pidieron ayuda a la embajada de nuestro país y le respondieron que deben llegar de alguna forma a la frontera, para pasar.