Al ver a la policía y al Grupo Lince, un menor de 16 años comenzó a correr y tratar de esconderse, lo que llamó la atención de los agentes, que comenzaron a seguirlo, pero lejos de hacer caso al grito de “deténgase”, el chico se refugió en las zonas inundadas.
“Al correr agarró un cable del tendido eléctrico y lo soltó, luego comenzó a amenazar al personal con arrojarlo al agua, a fin de quitarse la vida y electrocutar a los intervinientes”, contó el jefe del Grupo Lince, Venancio Benítez.
Luego de una larga conversación queriendo convencer al chico que se entregue voluntariamente, este solo tenía una condición, que todos salgan del agua y que le dejen “en paz”. Los agentes aceptaron la petición y se retiraron.
En eso, el chico creyó que “ganó la batalla”, se deshizo del cable, pero los Linces, atentos a cualquier movimiento, se tiraron tras él, logrando capturarlo luego de un forcejeo.
El hecho ocurrió el sábado, en el barrio San Felipe de Asunción. Los oficiales, se sumergieron al agua hasta el cuello. “La actuación del grupo no es nada rara, ellos están entrenados para cualquier situación”, alegó el comisario Benítez.
Según los vecinos, al momento de colocarle las esposas, el chico pidió socorro a gritos para que lo dejen libre, alegando que era “inocente”, incluso derramó algunas lágrimas, según se pudo ver en un video. Sin embargo, fue llevado a la Comisaría 5ta., donde se comprobó que tenía orden de captura por robo agravado. El mismo quedó detenido en dicha dependencia a cargo del Ministerio Público.
Por una moto, ladrón se escondió bajo los camalotes
El pasado 10 de mayo, Alejandro Catalino Cabrera Benítez se había robado una moto, y para su mala suerte, se cruzó con los Linces, que escucharon por radio la descripción del biciclo, por lo que inició una persecución.
Cabrera se metió en aguas del río Paraguay de la Costanera Norte, del barrio Cerrito de Asunción, creyendo que así iba a escapar. Pero los Linces lo siguieron nadando los camalotes, donde estaba escondido el ladrón.