Para muchos es solo un trapo, pero para ella representaba un amor puro e incondicional que pocos pueden comprender.
Aquella casaca que muchas veces fue la razón de su sonrisa y de sus llantos, abrazó su ataúd tal como ella lo pidió.
“El día que me muera quiero que mi cajón se pinte de azulgrana como mi corazón”, fue el deseo de Rosalía Duarte que ayer se cumplió. La fanática cerrista de 93 años fue despedida con todos los honores y como una digna seguidora del Club del Pueblo. Al son de la batucada azulgrana la llevaron hasta su última morada, no sin antes recorrer la Capital del Sentimiento.
“La murga nos acompañó desde la casa, pasamos por Novena Proyectada y le cantamos la polca de Cerro Porteño frente al club. De ahí arribamos al Cementerio del Este en caravana, nos esperaron varios hinchas y nos acompañaron hasta el entierro”, explicó a EXTRA Nicole Portillo, novia del nieto de ña Rosalía.
El corazón de quienes acompañaban el cortejo fúnebre estaba partido en dos. Tristes por el vacío que dejaba una de las abues más tiernas del Barrio y felices porque estaban convencidos de que todo se hizo tal como ella alguna vez lo deseó.
Famosas
Ña Rosalía junto a su melliza Rosa, se hicieron famosas luego de que Cerro mostrara la pasión que sentían en una campaña para captar socios en el 2018.
Ambas, a pesar de sus problemas de salud, acompañaban al Ciclón cada vez que podían, en una de esas las cámaras captaron a las hermanas muy emocionadas en las gradas y desde ese entonces fueron reconocidas como las hinchas más tiernas del Barrio. Una de ellas ahora alentará a su club desde la eternidad.