Ulises Eliseo Núñez Cabrera (31) un exoperario de radio quien confesó haber baleado y quemado a la joven Natalia Silveira (22), fue condenado ayer a 30 años de cárcel por feminicidio.
El Ministerio Público había solicitado la pena máxima más cinco años como medida de seguridad, pero el tribunal integrado por los jueces Javier Sapena, Liz Ramírez y Leticia Fracci, explicaron que no se pidió informe psicológico para determinar su peligrosidad, por lo que el castigo quedó en las tres décadas.
El caso
Entre la noche del 10 y la madrugada del 11 de abril de 2018, el cuerpo de la joven madre y estudiante fue encontrado calcinado dentro de su auto, en el barrio San José, San Lorenzo.
Ulises conoció a Natalia en un grupo de escorts (damas de compañía). Tras compartir varios encuentros sexuales, se enamoró de la mujer, consideró que ella era “su pareja”.
Se compró un arma y siempre la llevaba a cuestas en cada encuentro, porque según sus propias palabras “ya sabía lo que quería hacer”, pero que “se atajaba”.
Un par de días después, el hombre llamó a una radio para contarle a su excompañera de trabajo lo que había hecho. “Yo maté a Natalia”, dijo en aquel momento.
En un relato frío y con lujos de detalles, Núñez dijo que aquella noche, la mujer le había pospuesto la cita varias horas, además que “se puso extremadamente sexy para volver a salir con otros tipos”, intentó justificar que esa noche había tomado la decisión de matarla.
Después de su encuentro, le disparó en la cabeza estando en el auto de ella, llevó el cadáver nuevamente al motel para luego, seguir unas cuadras más y quemar el auto con la mujer adentro.
La médica forense Liliana Bogarín diagnosticó la causa de fallecimiento “asfixia por edema de pulmón”, es decir, murió por inhalar mucho humo y luego por calcinamiento. Se concluyó que Nati estaba viva cuando fue quemada.