Monseñor Amancio Benítez, secretario de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), dijo que si se quiere evitar que los fieles católicos vayan a Caacupé por el Día de la Virgen, debe haber un paro total.
“Es casi imposible atajar y es por eso que se hace el protocolo, porque si no se hace, será un sarambi. Si el Gobierno o el Ministerio de Salud no decreta cuarentena total, la gente va a salir”, advirtió.
El obispo de Benjamín Aceval aclaró que el tema de Caacupé será analizado hoy en la Asamblea Plenaria Ordinaria de la CEP, que se está desarrollando de forma virtual.
El religioso reiteró que no es la Iglesia la que promociona que la gente peregrine. “No queremos que se vayan y se aglomeren, pero no tenemos la potestad de atajar a los colectivos, a los que transitan ”, expresó.
El doctor Guillermo Sequera, titular de Vigilancia de la Salud, avisó que la festividad de la Virgen de Caacupé es un evento que tiene sus riesgos, pero que no hay un “espíritu de prohibir todo”. Agregó que aún se está evaluando la situación. “Todavía tenemos un mes para ello”, expresó.
Teléfono cortado
El director de la Región Sanitaria de Cordillera confirmó a EXTRA que hizo un pedido oficial de suspender la visita a Tupasy Ykua debido a la aglomeración registrada el domingo último. “No usaron tapabocas, no respetaron distanciamiento”, reprochó. Sin embargo, indicó que la última palabra la tiene el intendente y el obispado.
El jefe comunal, Diego Riveros, indicó que no recibió ninguna solicitud y que siguen las visitas a la capital espiritual del país. Para este fin de semana se prevé un dote mayor de seguridad para hacer cumplir el protocolo de distanciamiento.