En segundos, cientos de cosas le pasaron por la mente. Toda su vida transcurrió ante sus ojos, pero su corazón le pidió que luche. “Pensé en que mi hijo me va a necesitar mucho”, expresó Ángel Da Silva Gamarra. El joven que sobrevivió a la tormenta de viento que amenazaba con lanzarlo fuera de un andamio, el jueves último en Asunción, habló con EXTRA desde su camilla del hospital de IPS Ingavi.
Ángel, de 32 años, recibió a nuestro equipo con una gran sonrisa, aunque todavía le cuesta asimilar todo lo que ocurrió ese día. “Creí que el viento me iba a llevar, me da pirî cada vez que veo mi video”, expresó.
Recordando ese momento relató que con su compañero estaban colocando vidrios en el piso 20 del edificio en construcción, cuando empezó a cambiar el tiempo.
“De repente nomás vino el viento, le dije a mi compañero para bajar nomás ya”, explicó. Tanto él como su colega tenían puestos los arneses, pero al ver que sus demás compas lograron agarrarlo y meterlo por la ventana, en la altura se sintió atrapado por esa protección.
“Me desesperé y me saqué. Creí que me iba a quedar colgado, que me iba a morir”, admitó.
Ángel asegura que Dios le cuidó en ese momento gracias a que su mamá siempre le da su bendición. Actualmente ella también está pasando un momento difícil, en la dura lucha contra el cáncer.
Antes, una cirugía
Da Silva mencionó que no es la primera vez que se encuentra de frente con la muerte. Cuando tenía 20 años sobrevivió a un grave accidente, donde tuvo que superar una compleja cirugía craneal.
Ángel es oriundo de Caaguazú, pero vive actualmente en Capiatá. Él seguirá internado y luego pasará a reposar durante un mes, durante el cual su patrón prometió ayudarlo.
“Fue un traumatismo grave”, dijo médico
El doctor Carlos Montiel mencionó que Ángel tuvo un traumatismo muy grave, por lo que tuvieron que ponerle seis clavijas que le sacarán en un mes. De momento, seguirá internado.