Quizá no les quite el sueño las cuentas de la ANDE, del agua, del almacén, pero no por eso sus vidas son perfectas.
Los jugadores de fútbol a menudo también atraviesan duras crisis, así como a la que se enfrentó el pelotero de Cerro, Alberto Espínola.
“Quería compartir con ustedes algo que muchos seguramente no saben. Tuve mi momento de bajón, ese bajón que duró muchos días, hasta meses. Ya no era el mismo”, reveló el futbolista en su cuenta de Instagram.
Beto miró fijamente a la cámara y sin vergüenza habló de cómo su situación lo obligó incluso a consultar con un experto. “Entonces decidí buscar ayuda de un profesional. Sí, de un psicólogo. De esas sesiones de risas, cuestionamientos y, por qué no, llantos... gracias a eso ahora soy una mejor persona, un mejor profesional”, expresó en el video. El pasado 10 de octubre se conmemoró el Día Mundial de la Salud Mental, un tema que en nuestro país sigue siendo considerado un tabú, más aún cuando se trata de profesionales del balompié.
El también jugador de la Albirró, en su objetivo de crear conciencia dejó un mensaje sobre lo importante que es cuidar también la mente. “Animate a hablar, animate a tener esas sesiones y vas a ver que vas a ser otra persona y te va a ayudar muchísimo”, concluyó.
Antecedente
Pero Espínola no fue el único que sintió la necesidad de recurrir a un profesional. En su momento, su excompañero de equipo, Santiago Arzamendia, también había contado lo mal que le hacía leer los ataques hacia su persona en las redes sociales.
“En estos últimos tiempos pensé que todo se venía sobre mí. Me hacía entrar inseguro en cada partido”, contó días antes de viajar a España y acoplarse al Cádiz. Mencionó que el propio DT Francisco Arce le habló de un psicólogo con quien luego inició un tratamiento. “Me ayudó, me dijo que tenía un amigo que era un colombiano. Llegué a tener charlas con esa persona dos veces a la semana”, reveló Arza, quien actualmente es uno de los titulares indiscutibles de la Albirroja.