Apenas ocho años después de que le detectaran un cáncer de mama, producto de un pequeño tumor que no llegaba a ocho milímetros, la doctora María Cristina Talavera ahora atraviesa una metástasis en el cerebro; las células cancerígenas se propagaron de su lugar de origen a la cabeza.
Pero su historia es digna de destacar, pues desde el 2012 corre sin parar gracias a una indicación médica, incluso en el exterior, siempre vestida de rosa y acompañada de una bandera. Su primera carrera fue de 5 kilómetros, pero llegó a alcanzar hasta 42 kilómetros, teniendo 60 años. Empezó conformándose con las medallas de agradecimiento por participar en las corridas, pero fue más allá y terminó subiendo al podio.
Pero ahora, su hija Gaby Vargas Talavera, quiere sorprenderla en este difícil momento. “Quiero que me ayuden para que llegue a Roque Santa Cruz, su ídolo y él pueda regalarle a mi mamá por este mes la camiseta rosa. Le hará muy feliz”, escribió la profesional en su Twitter.
En el último partido que disputó Olimpia, madre e hija vieron juntas, y justo se estrenó la camiseta especial del Decano, de ahí el pedido de Gaby.
Además, la longeva luchadora, en su última carrera, fue nada más y nada menos que la ganadora en su categoría, en el evento Olimpia Run.
Otras actividades
Actualmente, están haciendo una rifa solidaria para costear los gastos del tratamiento. Para ayudar: (0985) 756 212.