Luis Cárdenas, portero boliviano de 27 años, llegó a las instalaciones del Deportivo Guabirá de Montero, en el departamento de Santa Cruz, que juega en la Primera División del vecino país, para entrenar con sus compañeros. Sin embargo, el DT del equipo, Víctor Hugo Antelo, pilló que el muchacho llegó con un “incendio cañaveral jefe” y tomó una insólita decisión: ¡control de alcoholemia!
Al golero ya no le dio tiempo de retroceder ni buscar un camino alternativo para evitar la barrera, como suelen hacer los irresponsables. Ya durante el control, Cárdenas por poco no hizo explotar el aparatito. Había pasado directo a la práctica, desde una gran farra que se realizó en una ciudad cercana a Montero.
Muy enojado, Antelo decidió separar del plantel a su arquero. Lo insólito del caso es que no fue el primer caso. Días atrás, el delantero Mauricio Chajtur, boliviano de 22 años, también cayó en la barrera, dio positivo y fue bajado a la reserva.
“No son dignos de estar con nosotros; en el fútbol boliviano son perdonados mil veces y por eso la mediocridad”, tiroteó Antelo, DT de 53 años.
No hay tu tía
Víctor Hugo es el máximo goleador de la Primera División del fútbol boliviano con 350 goles en 18 temporadas. Es muy conocido por su carácter fuerte y por ser devoto de la disciplina.
Por esta razón, decidió expulsar del equipo a Cárdenas y a Chajtur, animándose a terminar el presente torneo con jugadores de la casa.
“Los tests de alcoholemia se hacen cuando hay casos sospechosos y como en toda empresa es normal, acá debería ser obligatorio”, añadió el técnico.
Eso sí, Antelo se encontró con un obstáculo, el presidente del club, Rafael Paz, quien pese a apoyar a su DT, le pidió tener consideración con los muchachos y perdonarlos por esta vez.
“Es increíble que el ser humano se autodestruya. Nosotros no podíamos hacer la vista gorda”, retrucó Tucho. Menos mal que la frase es: “si bebes no conduzcas”. A favor de Cárdenas y Chajtur, nadie habló de no entrenar.
Pedro Chávez, Javier Lezcano y Nelson Amarilla son los paraguayos que están chutando en el Guabirá. Por cierto, ¿se imaginan si los equipos paraguayos llegaran a aplicar la estrategia de Víctor Hugo Antelo?