Foto: Pelota Tata
No era un domingo cualquiera, jugaba el Ciclón de Barrio Obrero y Matteo lo sabía. Entonces, con la ayuda de su mami eligió una camiseta de entre las 5 que tiene y se la puso, aunque quiso llevar todas.
El pequeño hincha de 1 año y 10 meses estaba emocionado y no podía esperar llegar a la Nueva Olla, por lo que durante el viaje que emprendieron desde Luque, donde vive la familia, iba cantando en el auto su canción favorita que dice “desde chico sos mi enfermedad de la que nunca me quiero curar”, con su abuelito Tomás.
Al entrar al estadio, en el sector de Preferencias, Matteo se unió a la hinchada que al igual que él fue a alentar al Azulgrana, en el encuentro contra Sportivo Luqueño. El hermoso bebé no pasó desapercibido, pues muy cómodo en el hombro de su papá no paró de cantar, levantar los brazos y saltar al son de sus rulitos, que hacían más tierna la escena.
Wilson Dioverti, el papá de Matteo, contó que su hijo es socio desde que estaba en la panza de su mami, Irma Brítez. Aunque suene increíble, es así; cuando Wilson e Irma fueron al control prenatal y se enteraron de que tendrían un varón, el padre primerizo llevó la ecografía al club y asoció a su retoño, a los 5 meses de gestación.
Irma y Wilson, justamente se conocieron gracias a los colores azul y rojo, cuando viajaron juntos en la Línea 28 después de un partido de Cerro, en el 2010. “Es hermoso ver a los niños en las gradas, ya que ellos son los hinchas del futuro”, manifestó Wilson y resaltó que esperan con alegría que el Ciclón sea el campeón.