05 sept. 2025

¡De infarto! Los momentos de korasõ rasy y de “vale un trago” que nos dio la Albirroja

Entre gritos, nervios y un travesaño que casi se rompe, Paraguay empató sin goles con Ecuador y festejó la ansiada clasificación al Mundial.

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Matías Rojas festejando la clasificación.

Ayer, la noche en el Defensores del Chaco fue de infarto para todos los hinchas y los jugadores. Aunque el empate de 0-0 con Ecuador nos dio la clasificación, el partido estuvo lleno de minutos que hacían latir nuestro corazón más fuerte con cada llegada del rival y cada remate al arco de nuestros jugadores.

La Albirroja se mostró superior en los primeros minutos, metiendo mucha presión en el área rival. Ramón Sosa fue el que más se animó. A los 12 minutos hizo un tiro cruzado que hizo volar a Galíndez y 3 minutos después hizo otro remate que terminó en las manos del arquero. Ahí todos se levantaron de sus asientos, porque el grito de gol parecía que ya venía.

Pero la selección de Ecuador no se quedó atrás y cerca de la media hora de juego, aprovecharon la ansiedad de nuestros jugadores para ganar más dominio de la pelota. En un descuido de la defensa albirroja, Nilson Angulo quedó bien perfilado y sacó un disparo que obligó a “Gatito” Fernández a estirarse para evitar la caída del arco paraguayo. Fue el primer gran susto que hizo que cientos se agarraran la cabeza de la desesperación.

El primer tiempo terminó con varios roces y discusiones entre los jugadores que dejaron ver el nerviosismo en la cancha.

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Ronaldo Martínez fue la nueva cara que debutó anoche con la albirroja.

Hicieron temblar el arco

El segundo tiempo arrancó trabado, hasta que llegó la doble emoción. Primero Antonio Sanabria casi rompe el cero con un mano a mano que el arquero ecuatoriano tapó justo, y en la misma jugada Andrés Cubas reventó el travesaño con un zapatazo desde afuera que dejó temblando el arco rival. La gente incluso saltó para festejar, pero la pelota dijo que no.

Después fue el turno del miedo de nuevo. En el minuto 67, el ecuatoriano Kendry Páez probó un remate con la pierna izquierda desde dentro del área, pero por suerte el tiro se fue desviado, pasando por encima del travesaño. Ahí el Defensores volvió a respirar.

Los últimos minutos fue disminuyendo la tensión. Ecuador ya clasificado jugó con despreocupación y a su vez la albirroja ya sentía su clasificación directa con la goleada de 3 a 0 de Argentina contra Venezuela.

El pitazo final desató la locura con un festejo gigante, porque Paraguay vuelve a decir presente en un Mundial después de 16 años.