14 dic. 2024

Corte le dice “no” a pedido de Rotela y líder del clan seguirá en Emboscada

El peligroso recluso denunció trato inhumano y dijo que afecta a estado de ánimo.

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Armando Javier Rotela.

Archivo.

La Sala Penal de la Corte le bajó el pulgar a un hábeas corpus genérico que presentó la defensa de Armando Javier Rotela, líder del Clan Rotela, quien había denunciado que recibía un trato inhumano en una celda de máxima seguridad de Emboscada.

El interno pidió una reconsideración a las condiciones en las que se encuentra en reclusión, que según él no son las mejores, y aparentemente buscaría ser trasladado a otra cárcel, pero la Corte decidió que seguirá recluido en Emboscada.

Armando Rotela alegó que allí lo tratan de forma inhumana y que eso le afecta en su estado de ánimo y físicamente. También he’i que no se alimenta bien y que muchas veces ni si quiera tiene productos de aseo personal.

Cámaras

En agosto pasado, el líder del clan Rotela demostró su poderío al violar el sistema de “máxima seguridad” de la cárcel de Emboscada.

Rotela y otros internos se ingeniaron para desviar las cámaras de seguridad y monitoreo para ingresar teléfonos celulares y otros artículos de las celdas. El hecho habría ocurrido el pasado 19 de agosto.

Los videos del circuito cerrado dados a conocer por Telefuturo muestran cómo los reos recibieron la ayuda de guardiacárceles corruptos. Proveídos de algunas herramientas como: cintas de tela, botellitas y limpiavidrios, hicieron de las suyas.

Como consecuencia algunos miembros fueron trasladados a Minga Guazú e incluso fue destituido el director del centro penitenciario, Tomás Bolaños, quien fue reemplazado por Jesús Emmanuel Pérez Guerrero, por disposición del Ministerio de Justicia.

Los reos ataron sus zapatillas por las telas y las lanzaron a través de sus rejas hasta el medio del pasillo donde se encuentran las cámaras que graban cada una de las celdas.

Otro video muestra que Armando Rotela usó un palillo limpiavidrios para romper la cámara de seguridad que se encontraba dentro de su calabozo.