Soy Mabel, tengo 20 años, y aunque no me considero la más linda del mundo, tampoco creo ser tan fea.
Soy alta, estudio en la facu ya, me gustan los videojuegos y, sí, soy de esas personas que no tiene filtro al hablar. A veces creo que eso aleja a la gente. Tal vez por eso me cuesta tanto entender qué hice mal o por qué no fui suficiente.
Hace poco me enamoré de alguien. No era perfecto ni la gran cosa, pero me gustaba.
Me hacía reír, me hacía sentir que tal vez era realmente importante para él, que estaba buscando lo mismo que yo.
Pero no, reboté de acá a la China. Él nunca se fijó en mí como yo en él, por eso es que dejó de hablarme. Y eso me rompió en mil pedazos.
Enamorado
Había sido yo malinterpreté todito las cosas, creí que se estaba enamorando. Un día nos vimos para hacer un trabajo en el que yo iba a ayudarle, y ahí no aguanté más y le di un beso, porque como él no se animaba pensaba que era mi turno de avanzar.
Pero me empujó y me dijo que no confunda las cosas, que soy agradable, pero no soy el tipo de mujer que él quiere.
Le pregunté qué tipo debe ser entonces. Ahí me dijo que le gustan más tiernas, más delicadas, yo soy muy onda loperro, y muy argel de repente, sin chiste y sin gracia. No me dijo así de crudo, fue más sutil, pero así lo entendí yo.
Lloré tanto que siento que ya no me quedan lágrimas.
Es raro, a veces quiero llorar, pero no puedo. Me duele el pecho, como si algo me apretara desde adentro.
Me pregunto todo el tiempo qué hice mal. ¿Fui demasiado? ¿Fui poco? ¿Hablé de más? ¿Debí callarme? ¿Será porque soy egoísta o caprichosa? Soy hija única, y aunque siempre tuve gente a mi alrededor, nunca aprendí del todo a conectar de verdad.
En la universidad no soy la más sociable, pero siempre fui buena con quienes me importan.
A veces me siento una tonta por eso. Mi orgullo está herido, claro que sí, siento ganas de romper algo, de gritar, de sacarme este nudo del pecho que me deja sin aire.
No quiero que me tengan lástima, solo necesitaba soltar esto. Porque sé que no soy la única que se sintió así alguna vez, porque allá afuera hay más personas como yo, intentando entender por qué duele tanto amar a alguien que no te ama. Solo quiero saber por qué.
La respuesta: