24 abr. 2024

Monopolio

El cannabis medicinal no es una droga, no es adictiva y no mata.

A partir de ayer se elabora, oficialmente, medicamentos a base de cannabis destinados a los pacientes con epilepsia refractaria, después de largos debates sobre el uso medicinal que tiene “la hierba maldita”, como es mal conocida.

En diciembre del año pasado se aprobó la ley que legaliza el uso de la planta de cannabis y sus derivados con fines medicinales, pero solo tiene permiso un laboratorio. Y uno muy grande. En contrapartida, Édgar Martínez, actualmente sigue con la condena de 2 años y medio de cárcel por haber producido para otras personas que no tienen la posibilidad de comprar.

El doctor Juan Khon Gallardon del Instituto Paraguayo del Cannabis, aseguró que la disposición busca seguir la línea de un monopolio para la producción del aceite.

“La ley salió para beneficiar únicamente a dicho laboratorio y que fue elaborada por el mismo”, dijo a 1020 AM.

Para que entienda, el querido lector, el cannabis medicinal no es una droga, puesto que no es una sustancia adictiva y no mata. Es un remedio y que a nivel mundial hay más de 70 cepas (variedades), en Paraguay, según los estudios realizados por la UNA, solo existen 7 cepas. Comentó que la organización Mamá Cultiva descubrió las variedades de estas.

El doctor Khon, ejemplificó también que si una madre va a preparar en su casa no le va salir más de G. 50.000, sin embargo, dijo que el laboratorio vende a G. 1.800.000.

“La ley está preparada para las empresas. Lo que preparan las de Mamá Cultiva es mucho más efectivo”, aseveró.

La lucha de las mamás y de los papás que están atrás de la salud de la vida de sus seres queridos y pidiendo solo mejor calidad de vida la tienen que sufrir para juntar dinero para comprar un poquito de tranquilidad.

Lo que pretenden hacer creer es que la gente no sabe cómo hacer hielo en bolsitas, para poder venderlos solo ellos, los farmaceúticos. Y no es que quiera hacer apología a nada, si no que ponerme en el lugar del otro. Un poco de empatía. ¿Qué harías vos por un familiar al que ningún medicamento “estandar” mejora su salud? ¿Serías Édgar?