23 abr. 2024

Lorenzo ya no se fue a trabajar

“De 50.000 personas empleadas en seguridad, solo 5.000 están formalizadas”

Lorenzo David Duré, guardia de seguridad de tan solo 21 años, ya no está en su puesto de trabajo desde el lunes. El domingo, cuando estaba trabajando en un local comercial en Capiatá, fue asesinado a sangre fría por delincuentes, a pocos meses de empezar a laburar.

En nuestro país existen aproximadamente 200 empresas privadas de seguridad que dan empleo a 50.000 personas, de las cuales apenas 5.000 están formalizadas, según el último reporte que realizó el Ministerio de Trabajo, en junio pasado.

Ayer, sindicalistas recordaban la muerte de Lorenzo y de otros compañeros suyos. Nos debería obligar a pensar más en los guardias privados que exponen diariamente sus vidas en condiciones laborales muy precarias.

En agosto, la directora del Trabajo, Catalina Ocampos, señaló que este año varias empresas de seguridad privada fueron denunciadas ante el Ministerio del Trabajo por despidos injustificados, y varias son reincidentes en las mismas prácticas. El caso más reciente es el de la empresa Radar, que echó a 24 trabajadores sin pagarles la indemnización.

Esta muerte nos hace pensar si Lorenzo tenía la suficiente capacitación para enfrentar a delincuentes. O si contaba con chaleco antibalas. Además si cobraba los G. 3.000.000 que marca la ley para los que trabajan como seguridad. Si tenía seguro de vida… lo más probable es que la respuesta sea no.

Con 12 horas de trabajo, a duras penas las empresas proveen de casetas para resguardarlos de la lluvia o el intenso calor. Muchos, almuerzan parados. Y son trasladados a otras dependencias, sin llevar en cuenta si viven lejos o no.

No es ningún secreto que en varias de estas empresas están metidas antiguas autoridades de instituciones, como la Policía. Pero hasta el momento, el Ministerio de Trabajo no ha logrado la desprecarización de este sector, a pesar de recibir miles de denuncias en su contra.

No olvidemos que los guardias son trabajadores, como nosotros. Que también madrugan o trasnochan para llevar un poco de comida a su casa. Seamos solidarios entre nosotros.