@ruthbenitezdiaz Desde la confirmación de la visita del papa Francisco a Paraguay muchos hablaron de que sería sin duda el mejor ministro de Obras Públicas, ya que apenas se pronunció su nombre se aceleraron las obras. Pero ese cargo no es el único que le queda bien a Jorge Bergoglio. El jesuita sería además el mejor maquillador, un milagroso maquillador.
Como lo destacaron varios medios internacionales, los gobiernos de Ecuador y Bolivia también invirtieron grandes sumas para cubrir y poner todo a punto antes de la llegada de Francisco. Paraguay no fue la excepción, y aunque no está mal arreglar la casa cuando se va a recibir visitas, es triste que a las apuradas se intente maquillar todo ahora.
Con esto el gobierno solo demuestra su total desinterés hacia la gente que todos los días padece torturas para llegar a destino a tiempo y sin el tren delantero roto. ¿Por qué pueden reparar los caminos en mal estado ahora? ¿Cuántas veces les hemos rogado? ¿Por qué tiene que venir el papa para que ejecuten el presupuesto tanto del ministerio como de la municipalidad?
Ayer un grupo de programadores paraguayos lanzaron el “Papa Road”, un juego que causa furor, en el que se ve a Francisco en su papamóvil por las calles de Asunción y esquivando baches, cuando cae a uno de ellos, aparece Arnaldo Samaniego alentando a “seguir”. También los carteles indicadores en coreano. El juego no se aleja de la realidad, la diferencia es que no es el líder católico el que cae a esos baches. Ojalá Bergoglio visitara cada uno de nuestros barrios, para hacerlos habitables, fue el clamor de todos en estos días.
Por otra parte, e inútilmente, como si el argentino no conociera Paraguay, en coincidencia con su llegada, varias organizaciones sociales denuncian otro tipo de maquillaje. Y es que el gobierno intenta esconder a los grupos sociales más olvidados, para no mostrar el Paraguay real. Esconden a los indígenas de las calles y varios grupos no podrán acceder a la reunión con el papa en el León Coundou. Así de doloroso es el país. Pero la realidad sigue a flor de piel, los granos siempre sobresalen el maquillaje.