Hombres y mujeres de todas las edades se acercaron ayer hasta el domicilio de Nelson Gustavo López, alias “Jakare po”, para acompañar a la familia del asaltante antes del entierro de sus restos a realizarse hoy en el cementerio de Villa Hayes, en el Chaco paraguayo. “Nelson tenía muchos amigos. Le gustaba jugar piki voley. Si veía un niño me decía ‘papá, comprale un champión o una camiseta’”, dijo Eligio López, el padre de “Jakare po”.
Eligio nació con los dedos de la mano izquierda más cortos, por ello recibió el apodo que también lleva su hijo. “Yo soy ‘Jakare po’, él no es ‘Jakare po’”, expresó el padre. Señoras desmayadas, hombres tatuados con caras de pocos amigos, además de una madre y un padre consternados se observaron durante el velorio. “El muchacho cometió un error en su vida. Solo Dios puede juzgarle. Él eligió ese camino”, expresó Erika Bareiro, vecina del fallecido.
Una tía de López manifestó que la familia gestionó la salida durante unas horas de la cárcel de Tacumbú de Víctor López, hermano de “Jakare po”, para estar presente en el entierro. “El director carcelario le negó", agregó el familiar.
Historial
López fue uno de los delincuentes más peligrosos y buscados del país hasta que recibió un balazo durante el asalto en el que se llevaron 35.000 mil dólares de un camión de una casa de cambios, el viernes pasado. El comisario Tomás Paredes Palma le atribuye la muerte de Miguel Galeano, el propietario del surtidor Petrobras asaltado el pasado 14 de septiembre. “El que le disparó fue él”, dijo Paredes a EXTRA.
Además se le acusa del robo a varios cajeros automáticos y la participación en el frustrado asalto al transportador de caudales de la empresa Guardián S.A., en Luque.