La madama del local saca un sofá y lo coloca en la vereda, donde las chicas se sientan con poca ropa, invitando sin reparos a los caballeros a entrar.
El prostíbulo se encuentra ubicado en medio de escuelas, una universidad, una iglesia y la plaza.
Miembros de la comisión vecinal “Loma Pytã - Túnel Semidei” ya no saben a quién más acudir para que cierren un prostíbulo que funciona sin ningún tipo de disimulo en plena zona residencial.
Edificio
“Los inquilinos del edificio están desesperados, porque los clientes se confunden y a la madrugada les golpean con todo la puerta, queriendo entrar”, lamentó uno de los denunciantes.
“Es un escándalo. No respetan nada. Esto ya es zona roja ni los conductores de Bolt quieren entrar más acá, porque dice que le marca zona roja”, lamentó otra vecina.
Pero lo que más les indigna es la basura que la dueña de la casa de cita tira en la plaza.
“Los preservativos usados quedan tirados ahí, a la vista de los niños que en su inocencia tocan y eso es muy peligroso. No se puede vivir así”, dijo el entrevistado, que prefirió el anonimato, por temor a represalias de la madama.
Ya realizaron denuncias ante la comisaría y la Municipalidad, pero hasta ahora nadie hizo nada. Por eso exigen que el local sea clausurado de forma definitiva. “Esto es un barrio familiar. No queremos prostíbulos acá, está sobre la ruta Transchaco”, lamentó en diálogo con EXTRA. La zona creció mucho por los universitarios brasileños y la regente lleva a sus chicas. Dicen que tiene apoyo político.