Las profanaciones de tumba para la reventa de panteones y nichos causaron un doble duelo a las familias denunciantes, en Presidente Franco.
Cynthia Olmedo y Carmen Keim, quienes señalaron que los restos de sus padres fueron sacados sin autorización para ubicar a otros difuntos, firmaron ayer un acta de acuerdo con el intendente Roque Godoy.
El jefe comunal se comprometió a reubicar los restos en sus respectivos lugares, con autorización judicial. Así también a abrir un sumario administrativo en busca de los responsables.
“Me dijeron que el plazo sería de seis meses, pero no acepté y me bajaron a cuatro meses”, explicó Carmen Keim.
Su papá, Miguel Keim, falleció el 13 de diciembre del 2009. Fue un empresario pionero en Presidente Franco.
“Se metieron con la persona equivocada, con quien ama a su padre y jamás dejaré que le falten el respeto”, dijo. Si no cumplen con su parte realizará la denuncia en la Fiscalía.
Los huesos de su padre estarían en una bolsita dentro de la tumba. “Yo pedí que se haga un ADN para asegurarme de que sean realmente sus restos”, apuntó.
Lío familiar
Con Cinthya Olmedo la Municipalidad acordó un plazo de seis meses para solucionar el problemón.
“No estoy conforme, pero lo hago por la familia del difunto que ahora ocupa el panteón de mi papá. Ellos compraron sin saber que era de otro”, indicó. Su tío, hermano de su papá, no estuvo de acuerdo. Si en seis meses no le dan una solución, la familia demandará.