Sol, pileta, aire libre y mucho alcohol. Esto fue lo que pintó el Último Primer Día (UPD) de un conocido colegio religioso de Asunción, donde según denunciaron testigos, fueron los mismos padres de familia quienes ponían en manos de los adolescentes la espumosa. La imagen indignó a testigos, quienes denunciaron el hecho.
La fiesta se llevó a cabo en el Club Sirio de Lambaré, donde según el denunciante, entre los menores corría de mano en mano desde vino y cerveza hasta wisky. “Lo más lamentable es que, en ciertos casos, sus propias madres le destapan una ‘Coronita’ a sus hijas al borde de la pileta”, comentaba el testigo.
Sonia Escauriza, directora de la Niñez del MEC, comentó que efectivamente existen casos donde los mismos padres de familia son quienes organizan el hoy día tan populoso UPD, donde los chicos festejan la llegada de su último primer día lectivo de su educación secundaria.
Mencionó que si bien no existe ningún tipo de prohibiciones respecto al tema, solo pueden apelar a la conciencia de los padres.
Uno o dos días antes
Escauriza refirió que actualmente las farras se realizan uno o dos días antes, aparentemente tras la ola de críticas que ligaron estudiantes años pasados por los desmanes ocasionados en colegios y la vía pública.
Incluso, el año pasado, varios alumnos de un colegio de Villarrica fueron rebotados al intentar entrar a clases luego de participar de su UPD.
“Hay buenísimos últimos primer día, sin alcohol, otros en los que los mismos padres también toman alcohol”, destacó Escauriza, asegurando que existe todo tipo de celebraciones.