Representantes de la Fundación Panambí realizan la acción legal para animar a otras “trans” a cambiarse el nombre. Yren Rotela (35) y Mariana Sepúlveda (36) estaban destinadas a llevar una vida fuera de lo que su género les dictaba desde los primeros años de vida. Ambas son activistas transexuales de la Fundación “Panambí” e iniciaron una acción legal ante el Ministerio Público para el cambio de sus nombres, ya que ninguna utiliza los que figuran en el registro civil de las personas.
“La primera discriminación que tenemos es por la identidad. Me construí con este nombre hace 17 años y fue por una novela que me gustó mucho, ‘Mariana de la Noche’. Me gustaba la trama y me identifiqué con ese nombre”, explicó Sepúlveda.
Añadió que sus familiares y amigos le reconocen con el nombre femenino y no por Emmanuel, como figura en sus documentos. Yren, quien es la presidenta de la organización, relató que su vida fue una constante transición.
Recordó que hace 22 años tuvo una charla con su papá, sobre su cambio de identidad. “'¿Por qué te querés cambiar de nombre, si yo ya te puse un nombre?’, me decía. Y justamente para no desprenderme de la familia di vuelta mi nombre civil que es Nery”, detalló.
Admitió que su mayor problema se presenta cuando precisa de un servicio de salud pública. “Esperás tu turno y te llaman con el nombre masculino siendo una rubia. Pero veo un poco de avance, porque yo tengo mi cédula con mi maquillaje, con mi cabello ondulado, como yo me siento bien”, reveló Rotela.