18 ago. 2025

Trágico final de un bebé y su madre detenida

Nadie sabía que la mujer estaba embarazada.

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La mujer fue grabada con su bebé y la bolsa que utilizó para acabar con la vida de su recién nacido

Un bebé recién nacido fue asfixiado con una bolsa de pañales por su propia madre. El comisario Jorge Mazacote, jefe de Investigaciones de Cordillera, relató a EXTRA los escalofriantes detalles del crimen.

El cuerpo del angelito fue arrojado en un yuyal de la compañía Ybyraty, en la ciudad de Escobar (Departamento de Paraguarí), donde finalmente habría sido devorado por animales silvestres.

El agente explicó que Rosa Agustina Ovelar Contreras (23) dio a luz el pasado viernes 1 de agosto en el Hospital Regional de Paraguarí, donde anotó al pequeño con el nombre de Daniel Marín. La mujer recibió el alta médica el domingo 3 de agosto.

La investigación se inició el 13 de agosto, tras una denuncia recibida en el sistema 147 Fono Ayuda, donde se alertaba que Rosa Agustina habría regalado o asesinado a su hijito.

La fiscal Betty Britez intervino y ordenó la detención de la acusada.

En un principio, la joven declaró que entregó al bebé en el Bañado Sur, en Asunción, pero los intervinientes hicieron las averiguaciones y no se encontró nada.

Luego dijo que lo dio a una familia en la zona de cerro Mbatovi, aunque las cámaras del hospital mostraron que se subió a un vehículo Bolt. Hablaron con el chofer y este dijo que llevó a la doña a otro lugar.

Contó todo

Finalmente, la mamá confesó que asfixió a su hijo con una bolsa de pañal. El comisario señaló que la mujer relató lo ocurrido con una calma que le sorprendió.

El sábado en horas de la tarde, los investigadores llegaron hasta el monte de la compañía Ybyraty, en Escobar, donde la acusada señaló que tiró el cuerpo. En el lugar encontraron un trozo de bolsa plástica de pañal y una pinza umbilical con restos del cordón.

El cuerpo ya no estaba, se presume que fue devorado por animales debido a que habían transcurrido 13 días del hecho.

Nadie sabía

Según el comisario Mazacote, ni la madre, ni el hermano, ni los vecinos de Rosa Agustina sabían que ella estaba embarazada y se mostraron conmocionados al enterarse de lo ocurrido.

La joven, que ya es madre de otra criatura (actualmente bajo la custodia de una tía, hermana de Rosa), quedó presa en la comisaría de Piribebuy, imputada por el crimen.