Talía Araña Ramírez (26) está con el Jesús en la boca desde el fin de semana, luego de atreverse a salir de la casa de su suegra, donde vivió por cuatro años entre golpes y gritos, según su denuncia.
Sin embargo, la señora, de nombre Blanca Cáceres, la sigue persiguiendo y amenazando con quitarle a sus dos hijas de 2 y 4 años.
“Desde que me fui a vivir a su casa, ella me maltrató físicamente y verbalmente, mi pareja nunca le dijo nada, siempre terminaba haciendo lo que ella le decía. Mucho tiempo aguanté por mis hijas, pero el viernes a la noche me pegó por la cara frente a mi hija de 4 años y eso me llenó”, contó la afectada, que vive en el barrio Itacurubí, de Concepción.
“Esta señora me manipulaba diciéndome que yo no tenía mamá ni papá que me defienda”, dijo Talía Araña, víctima de violencia por parte de su suegra.
El sábado decidió dejar la casa e ir a vivir sola con sus hijas, pero eso molestó a ña Blanca, que fue a buscarla a su trabajo, donde la maltrató verbalmente, por lo que Talía la denunció por violencia familiar.
Prisión domiciliaria
La suegra fue a la comisaría a pedir ayuda para traer a sus nietas, pero como no le hicieron caso, comenzó a maltratar a los uniformados y en un momento dado se tiró al suelo y dijo que los policías le pegaron.
Ante esto, la mujer quedó detenida con su hijo menor de 15 años, pero el lunes a la tarde se le dio prisión domiciliaria.
“Yo sigo con mucho miedo, porque ella no está bien de la cabeza, me sigue amenazando incluso con matarme, para que así mis hijas se queden con ella.Me dijo: ‘Te voy a quitar a tus hijas por las buenas o por las malas, aunque te tenga que matar’, yo no puedo ni dormir más por miedo a que mi suegra cumpla con su amenaza”, dijo la joven.
Le buscó en la escuela
Ayer, Talía tuvo que salir corriendo de su trabajo e ir a la escuela, ya que la profesora de su hija le avisó que el papá de la criatura iba a pasar a buscar a la nena. “Es un infierno lo que vivo, a nadie le deseo esto”, finalizó la madre.