La avenida Acceso Sur comienza desde el viaducto de 4 Mojones hasta Ruta I, a la salida del centro de la ciudad de Itá. El tramo es muy utilizado para el ingreso de las personas a la capital y es considerada por muchos como la más peligrosa, debido a la gran cantidad de accidentes que ocurren en la zona.
A este problema se suma la falta de refugios en las paradas. A lo largo del trayecto no existe ninguno que sirva para proteger del calor y la lluvia a las personas que esperan colectivo.
Misión imposible
Otra de las falencias es la falta de veredas; los pocos espacios existentes se encuentran invadidos por vehículos mal estacionados y mercaderías. Mario Blanco, jefe de Obras de la Municipalidad de Ñemby, consideró que la instalación de refugios para los pasajeros es casi imposible. “Cuando se construyó la avenida, se tuvo que ensanchar la ruta y muchas personas no fueron indemnizadas por haber cedido su terreno, por eso no quieren donar los espacios para las veredas. Ante este problema que existe en la mayor parte del tramo, es imposible ubicar cualquier tipo de refugio”, explicó Blanco.
Con este panorama y la inacción de autoridades la situación no promete solución a corto plazo.