Un hombre llegó hasta un hospital de Formosa, Argentina, pidiendo que le cortaran el órgano genital, porque, según él, ya era muy largo.
Como los doctores no quisieron acceder al pedido del señor, e incluso buscaron a profesionales psiquiátricos para que lo atendieron, creyendo que tenía problemas mentales, decidió solucionar la cuestión con sus propias manos.
Cuando los médicos regresaron, el paciente ya había desaparecido. Algunas personas vieron cuando el hombre entró apurado a un baño del nosocomio, donde cometió la locura y, con las hojas de una maquinita de afeitar, se cortó el miembro.
El personal de blanco se encontró con una terrible escena. El sujeto empezaba a desangrarse y, desesperado por el dolor, pedía que le volvieran a pegar el pene.
Fue auxiliado rápidamente; se encuentra en estado delicado. Según informaron medios argentinos, ocurrió el pasado jueves.