Jarrazos, trompadas y jalones de pelos. Así terminó ayer la festividad en Caacupé, luego de que peregrinos y vendedores se agarraran a golpes en plena calle, mientras otros fieles caían desmayados por el calor y los empujones.
La salida del show de fuegos artificiales fue el inicio del desastre. La marea humana avanzaba a los empujones, nadie podía moverse y varios terminaron tirados en el suelo, buscando aire.
Las ambulancias intentaban llegar, pero el tránsito estaba tan bloqueado que ni los paramédicos lograban abrirse paso, pese a la ayuda de la Policía. Muchos cargaban a niños y abuelitos para sacarlos como podían del apretón.
“¡NO EMPUJEN. HAY NIÑOS Y ABUELITOS, AUXILIO!”, se escuchaba por todos lados, mientras algunos intentaban proteger a sus familiares.
En medio de esa tensión, los nervios explotaron. Vendedores que ocupaban veredas y parte de la ruta se negaban a mover sus puestitos, lo que hizo enojar a los caminantes.
Le tiró agua
En uno de los videos que recorren en redes sociales, se ve cuando una vendedora le tira una jarra de agua a un promesero, que le reclamó el espacio. El hombre reaccionó enseguida y tumbó la sombrilla del puesto, desatando más gritos y empujones alrededor.
Otro moquete se registró metros más adelante, donde dos peregrinas, quienes iban rumbo al templo, se agarraron del pelo salvajemente.
¿Dónde están las rubias? 😱
— AhoraPy (@Ahora_Py) December 8, 2025
Un incidente llamó la atención de los peregrinos camino a Caacupé, cuando dos mujeres protagonizaron una pelea.
El hecho generó sorpresa entre los caminantes y obligó a la intervención de otros feligreses para calmar la situación. pic.twitter.com/4s9jIUxHSk
Un hombre mayor tuvo que meterse en medio para separarlas, mientras los demás intentaban avanzar entre la desesperación y el calor sofocante.
Muchos se plaguearon a viva voz y discutieron con policías por no poder dirigir el tránsito, según señalaron.
Les robaron toda la ganancia
Juan Gutierrez y su esposa, una pareja de vendedores, quienes acudieron a la celebración mariana, denunciaron el hurto de lo recaudado durante la festividad.
Según contaron desde su cuenta de Facebook, después de días de trabajo, esfuerzo y mucha ilusión, les arrebataron todo el dinero que habían logrado juntar.
A pesar del robo, destacaron el apoyo de la gente que pasó, compró y les dio la oportunidad de mostrar sus productos.
Detuvieron a tres cuidacoches
Otro dolor de cabeza de la noche fueron los cuidacoches. Tras denuncias sobre supuestas amenazas y cobros extorsivos por estacionar en zonas públicas, patrulleros llegaron hasta el barrio Ybu de Caacupé.
Allí detuvieron a tres hombres, uno de ellos con antecedentes por coacción sexual en 2013. La intervención estuvo a cargo del personal de la Comisaría 1ª, y los aprehendidos quedaron a disposición del Ministerio Público.