La casa del excura Manuel Benítez está ubicada frente a la iglesia San Lorenzo de la ciudad de Quiindy, departamento de Paraguarí, donde sirvió de párroco. A su vez, se encuentra al lado de la municipalidad donde ahora aspira instalarse.
La iglesia representa su pasado de religioso, y la Intendencia, cargo al que apunta por el Partido Colorado. “Es una señal vivir aquí. Son los caminos que elegí”, declaró a Extra.
Señaló que “resulta inevitable la comparación con Fernando Lugo. Cada uno tuvo un porqué. Que se haya animado a meterse a la política es altamente positivo porque le dio una nueva dinámica”.
Aclaró que dejó el sacerdocio en el 2009 para formar una familia, dedicarse a la docencia y estudiar la carrera de Derecho. En camino se encontraba su primer hijo cuando decidió colgar la sotana. “Me retiré para que esto no sea motivo de escándalo para la iglesia”, aseguró.
Benítez no tiene miedo a ser señalado por sus exfeligreses. “Seguro que se va a escarbar en mi pasado para dejarme mal parado, pero estoy sin miedo para afrontar ese hecho”, dijo.
Divididos
La población se mostró sorprendida al enterarse de sus intenciones y las opiniones están dividas en Quiindy. “No sabía que se va a candidatar. Debería tener otro trabajo antes de ocupar un cargo político”, dijo Nicolás Gaona, poblador.
Por su parte, Juan Cuenca manifestó que se trata de una buena persona. “La primera vez que escucho que es candidato es de parte tuya”. Jorge Britos dijo que “tiene formación intelectual. Otros candidatos que buscan ocupar cargos son analfabetos”.