06 may. 2024

Plancha ropas a domicilio por G. 100.000 para salir adelante

La pandemia la obligó a realizar los planchados a domicilio, pues en su lavandería ya casi no tenía clientes.

trabajadora

La guapa mujer asegura que ahora tiene muchos pedidos ya para ir a realizar planchados en las casas.

Hilda Camacho (36), tiene su lavandería y tintorería denominado “Las Gemelas”, en el barrio San Vicente de Asunción, pero desde hace un año, decidió salir casa por casa a realizar su trabajo de planchados, ya que con la pandemia, casi no tenía clientes.

“Al comienzo fue difícil, porque me criticaban por el precio, especialmente los varones, pero ahora ya tengo muchos clientes”, aseguró la mujer.

Según cuenta, su precio es de G. 100.000 por dos horas. “En este tiempo plancho todo lo que me ponen y todo tipo de ropas. Lo máximo que llegué a planchar fue 8 docenas de ropas, pero perfectamente, porque soy muy delicada y perfeccionista”, dijo orgullosamente.

La misma explicó que si ella lleva su plancha, cobra un G. 10.000 más. “Me gusta planchar más con el mío, porque tiene más potencia y me agiliza el trabajo. Ahora las personas me dicen ‘trae nomas vos tu plancha’ porque saben que es mejor”, sostuvo.

Hilda sigue teniendo también su lavandería donde atiende un empleado suyo. “La pandemia, me forzó todo mal, porque debía pagar alquiler de mi local a mi empleado y no había nada y como no quería quedarme con los brazos cruzados, entonces salí a buscar clientes y así estoy sosteniendo mi local, que no quiero cerrar”, afirmó.

También organiza el placar de las personas y realiza limpiezas de departamento, que dependiendo del tamaño pasa su presupuesto que van de G. 100.000 a 150.000.

Las personas que desean contactar con ella para los servicios de planchado y limpieza, pueden comunicarse con ella al (0981) 929-548. Va a San Lorenzo, Villa Elisa, Fernando de la Mora, Lambaré, Ñemby y todo Asunción “Las personas ya me conocen, saben mi trabajo y cómo soy, pues no hablo con nadie, esa es una de mis condiciones, solo me tienen que dejar la ropa sobre un sillón y yo les plancho, termino, me pagan y ya salgo del lugar”, manifestó.