La subcomisaría No. 32 de la colonia Itá Vera, del distrito de Domingo Martínez de Irala, ubicado a unos 65 kilómetros al sur de Ciudad del Este, fue atacada en la madrugada del domingo.
Según el relato de los policías que estaban de turno, responsabilizaron del hecho al papá y al hermano de un muchacho que fue aprehendido por tenencia de marihuana.
De acuerdo a lo manifestado por los agentes, Antonio Segovia Vera y su hijo Armando Segovia Vera, fueron los que llegaron hasta la sede policial ya que los vieron alejarse del lugar luego de escuchar una explosión. Minutos antes los uniformados habían detenido al adolescente de 16 años, quien también es acusado por exposición al peligro en el tránsito terrestre.
Cuando los policías verificaron la explosión, vieron que se había prendido el pasto y lograron sofocar las llamas, pero no se dieron cuenta de que el fuego alcanzó la carpa de la carrocería y la puerta izquierda de una camioneta de la marca Volkswagen, modelo Amarok, propiedad del suboficial inspector Derlis Arce.
Los agentes pudieron confirmar el daño al vehículo recién luego de amanecer, cuando los dos mencionados volvieron acompañados de 4 hombres a proferir amenazas contra los agentes policiales, en estado etílico, relata el informe.
El fiscal Demetrio Bareiro de Presidente Franco pidió a los agentes de Investigación de Hechos Punibles y de Criminalística la verificación de los hechos. Los uniformados recogieron del lugar dos botellas uno de vidrio y otro de plástico cargados de combustible diésel, como evidencia del hecho.
La subcomisaría no cuenta con cercado perimetral y los autores del hecho accedieron fácilmente al vehículo, que aparentemente intentaron incendiar, supuestamente en represalias por la aprehensión del menor de edad, que estaba conduciendo una motocicleta y tenía en su poder tocos de marihuana, conforme a la versión de los intervinientes.
El representante del Ministerio Público refirió que está esperando el informe detallado de Criminalística para ver qué determinación tomar con relación a los sospechosos de cometer el ataque con bomba incendiaria.