“No pude, tuve problemas con las facturas, empecé a tener menos trabajo”, fueron algunas de las excusas que un tornero dio para nunca pagar la asistencia alimenticia de su hijo.
El martes, durante un juicio oral, Juan González, de 53 años, fue condenado a 4 años de cárcel.
La fiscal de Luque Ingrid Cubilla contó a EXTRA que González, incluso, alegó tener hemorroides que supuestamente le impedían trabajar.
“Era más bien argumentar por qué no cumplió, no pudo justificar. Él mismo reconoció no haber cumplido esa resolución. En el registro del BNF informa nulo movimiento desde que se creó la cuenta judicial (en el 2014)”, señaló.
El condenado debía pasar G. 550.000 al mes, pero no abonó, por lo que ahora debe pasar alrededor de G. 38.000.000.
“Nunca le asistió, ni siquiera con una llamada, ni siquiera en su cumpleaños, ni siquiera en Navidad, Año Nuevo; un padre ausente afectiva y económicamente”, expresó Cubilla. Como el hijo ya es mayor de edad (tiene 19 años), puede exigirle el pago que decidió el juez (puede pedir embargo de bienes) mientras que el papá ya está cumpliendo la pena en la cárcel.
¿Quién deposita si papá o mamá van presos?
La fiscal Cubilla explicó que, en el caso de que los padres fueran condenados por el delito de incumplimiento del deber legal alimentario, los familiares directos deben responder.
“Tiene que ser dentro de la Ley de Obligados, en ese caso ver si tiene hermanos, padres, si es que es menor de edad. En este caso, también las víctimas pueden recurrir a través de la Defensoría Pública para solicitar una asistencia legal; se inicia el proceso y el juez es quien determina a quién le corresponde dentro de la inmediata línea”, refirió.
¿Dónde acudir?
Si no te pasa para la leche, debés ir hasta el Juzgado de la Niñez de tu ciudad. Ejemplo: esta denuncia entró en Luque. El número de Redam para esa zona es: (0981) 394-818. También podés consultar los pasos para denunciar a un padre moroso al (021) 422-060.