Con tan solo tres añitos, su pequeño cuerpo tuvo que aguantar todo tipo de golpes brutales.
La terrible violencia se dio a conocer en el Centro de Salud de J. Augusto Saldívar, donde el pequeño fue llevado por sus cuidadores.
Los médicos de guardia abrieron el protocolo de protección de niños y avisaron a la Policía y Fiscalía de Villeta, de donde es oriundo el niño, porque encontraron serios indicios de que el paciente sufría de violencia física, por los evidentes moretones que tenía en todo el cuerpo, nuevos y también viejos.
Viviana Llano, fiscal que investiga el caso, llegó hasta el lugar y corroboró la denuncia. Encontró al pequeño con rastros de haber sido golpeado con mucha brutalidad, tenía hasta quemaduras en la boca, ya que presuntamente, su padre le habría obligado a comer la comida muy caliente.
Los involucrados serían el padre biológico y la madrastra.
“El niño tiene rastros de golpes de puño, que el padre le propinaba”, lamentó la interviniente.
Cruel relato
El propio niño relató a los psicólogos de contención cómo su padre Juan Alberto C. B. y su madrastra Yenifer E. C. le pegaban y detalló todos los elementos que utilizaba para castigarlo físicamente, cinto, cables, zapatillas y golpes de puño.
Por todo lo que habría sufrido la criatura, la defensora, Blanca Valenzuela, pidió que el niño quede a cargo de la madre.
Tanto el progenitor y su pareja fueron detenidos y se encuentran en la comisaría 14 Central. Ambos serán imputados por violencia familiar. Además, el hombre también será procesado por el hecho punible de violación del deber del cuidado y maltrato de niños bajo tutela.
Unas 54 víctimas por día fueron atendidas de enero a julio de este año: 1840 sufrieron abuso sexual; 936 maltrato bajo tutela; 1256 casos de violación del deber del cuidado, entre otros.