El triste final del niño de 9 años, que llegó al Hospital de Mariano Roque Alonso sin vida y en estado de abandono, pudo evitarse si las autoridades hubiesen actuado en su momento.
La mujer, identificada como Sara Noemí Sosa Godoy (33), quedó detenida en la Comisaría 10° y el fiscal Itálico Rienzi la imputó por supuesto homicidio doloso por omisión, lesión grave, falta del deber del cuidado y omisión de auxilio.
Denuncias previas
La madre ya había sido denunciada por vecinos en FonoAyuda, quienes alertaron que Sara maltrataba a su hijo enfermo, en el 2024. Por si fuera poco, en febrero de este año la denuncia se reiteró, mediante el sistema 133, de la Defensoría de Luque.
En cambio, las autoridades no rescataron al niño que sufría de maltratos y necesitaba de cuidados especiales. Rienzi explicó que el niño tenía una enfermedad de nacimiento, denomina Tetralogía de Fallot, que es un problema de corazón.
El nene nunca recibió esos cuidados. “La criatura tenía síntomas de un descuido extremo: estaba deshidratada y tenía desnutrición severa”, señaló el fiscal.
La situación empeora aún más: según lo que la propia madre dijo al personal de blanco, el niño llevaba 72 horas con vómito y diarrea.
Cuando le preguntaron por qué no lo llevó antes a un hospital, supuestamente dijo que ella siempre lo cuidó así nomás en su casa.
La señora tiene otros dos hijos, de 15 y 13 años, y fue justamente la adolescente la que, desesperada, alzó a su hermanito y lo llevó al hospital para salvarle la vida.
“La madre la siguió e incluso retó a su hija por haber decidido buscar ayuda”, dijo el fiscal.
Para mejorar su calidad de vida, la criatura debía someterse a una cirugía definitiva en sus primeros años de vida, pero no le dieron esa oportunidad.
El fiscal recordó que el cargo de homicidio doloso contra la mamá lleva un agravante por tratarse de un familiar directo. De confirmarse, que dejó morir a su hijo, puede ser condenada a 30 años de cárcel.