“Criminal” e “indignante” fueron algunos de los calificativos de los usuarios en contra de la regulada de colectivos, que hacen los empresarios de transporte público para presionar por la suba de pasaje en el pico más alto y alarmante de la pandemia del coronavirus.
En las paradas de Asunción y ciudades aledañas se pueden ver aglomeraciones de personas, quienes esperan la llegada de los escasos micros que circulan repletos, exponiendo a los pasajeros a contagios masivos.
Algunas líneas tardan hasta dos horas en aparecer, lo que se agrava en las horas pico de salida del trabajo de mucha gente.
“Muchísimo esperé el ómnibus y nunca vino; vine de Luque y salí hasta (la avenida) Mariscal López para esperar colectivo y después tuve que subirme en un bus militar”, comentó una señora.
Otros afectados optaron por pagar el servicio de taxi o Uber para poder llegar a tiempo a su puesto laboral. Algunos pidieron socorro a familiares, para que los busquen, porque el ómnibus no aparecía y ya era de noche.
Ante el desesperante panorama, el Gobierno decidió de nuevo sacar a circulación camiones y colectivos de las Fuerzas Armadas, que circularon en los itinerarios de entrada y salida de Asunción.
Desde el Viceministerio de Transporte se informó que la Fiscalía es la que debe accionar contra las empresas.
No subirá el pasaje
Aparece transporte alternativo
Unos 30 motoqueiros que hacen delivery esperarán hoy, desde temprano, en el viaducto de 4 Mojones para llevar hasta el centro de Asunción a la gente afectada por la regulada. Cobrarán G. 5.000 por el combustible, se informó desde el Sindicato Nacional de Trabajadores en Moto.
El MOPC aseguró que no subirá el pasaje y anunció que se promulgó una ley que permite usar vehículos especiales como transporte público de pasajeros.