“Lloro todas las noches recordando que la última vez que vi a mi hija fue cuando se subió a la moto de ese ‘plaga’. Ella no me contó que ese su ‘chico’i’ le garroteaba porque, si yo sabía, le iba a solucionar su problema y mi nieta todavía iba a tener mamá”, dijo Cecilia Medina, madre de Mercedez Verón, quien fue asesinada a golpes por su novio el pasado 10 de enero, en Villa Hayes.
La víctima era pareja del músico Eligio Franco, quien se encuentra prófugo desde hace veinte días. Algunos vecinos aseguran que el hombre sigue por la ciudad, pero la Policía no logra encontrarlo.
Un domingo, a las 23:00 horas, ña Cecilia escuchó que una moto se detuvo frente a su casa. Mercedez salió de su pieza, aseguró la puerta y le entregó la llave a su mamá. “Me dijo que iba a salir con Eligio y que volvería en unas horas, yo vi cuando se subió a la moto del tipo y se fue”, relató la familiar.
La joven solía ir al Karaoke “Patio Lucero” a ver cantar al ahora fugitivo. Pero los lunes, a primera hora, ya encendía el carbón en el brasero para preparar mate para su mamá y el desayuno de su hija de 9 años, detalló la allegada.
A la mañana siguiente, Rosa Ávalos, dueña del inquilinato donde vivía el músico, encontró muerta a la hija de ña Cecilia. “Los parientes de la chica vinieron a preguntar por ella, yo no los había visto (a ambos) porque no estuve en la casa. Golpeé la puerta de su pieza, entré y encontré a la pobre mujer muerta, con la cara toda golpeada y llena de sangre”, contó Ávalos.