“¿Por qué le aprietan a los campesinos?”, es la pregunta que se repite una y otra vez Don Félix Sánchez, mientras se seca el sudor.
Desde un rincón de la compañía Ñanemaitei, de Caaguazú, el agricultor de 57 años contó la lucha que viene teniendo con la ANDE.
“En enero del 2018 en mi factura me venía G. 40.000, pero después de que me cambiaron el medidor, los montos fueron subiendo”, explicó.
No entiende cómo se produjo el aumento, ya que señaló que vive únicamente con su esposa y que solo tienen una heladera y un ventilador.
“Me vino primero G. 400.000 después G. 500.000, eso ya luego no podía pagar y me fraccionaron hasta que después ya subió a G. 2.700.000, me fui reclamé y me decían que iban a venir a ver el medidor pero nunca llegaron”, expresó.
En la última factura la deuda de Don Félix ya trepó a los G. 5.395.0000.
Afectados
Eleuterio Duarte, coordinador de un grupo multisectorial, aseguró que solo en varios distritos de Caaguazú, la cantidad de afectados por supuestos cobros irregulares ya suman 7.000.
“Acá los más pobres son los afectados, mucho ya denunciamos pero nadie nos hace caso, queremos la condonación de esas deudas”, reclamó.
Él asegura que el problema son los medidores chinos.
“Un ingeniero nos dijo que el medidor fue rechazado en China y acá está programado para consumir más”, aseveró.
No figuraba que ya pagó
Francisco Lezcano vive en la colonia Jacare´i de Caaguazú y forma parte de la lista de usuarios afectados por la sobrefacturación.
“Nos fuimos a pagar G. 339.000 y dijeron que era más porque lo que pagué antes no estaba en el sistema”, dijo. Ahora ya debe G. 2.024.000.
Asegura que a pesar de las denuncias no encuentran solución.
Abuelito desesperado
Martín Gómez vive solito en una humilde casa de madera ubicada también en la colonia Jacare´i.
Está desesperado porque al mes la luz le viene G. 500.000. Sus vecinos cuentan que él vive solo y que no tiene si quiera electrodomésticos. Nadie comprende porque el consumo de la energía para un señor de la tercera edad suba tanto de la noche a la mañana.
Debe más de G. 6 millones
Blanca López dijo que se mudó hace dos años a la colonia y que durante un año y medio pidió a la ANDE para su medidor, pero que nunca le hicieron caso.
Por eso ahora deberá pagar una multa de G. 6.223.000 por conexión clandestina. “Yo no tengo de dónde sacar”, dijo.
Reconoce que tuvo conexión clandestina durante 6 meses, argumentó que en ese momento tenía hijos chicos y se vio obligada a acceder a la electricidad como sea, pero culpa a la desidia de la estatal por la demora en que le coloquen el medidor.