Amada Montiel tomaba mate con su comadre en la tarde del martes cuando llegó una vecina y le agarró del cuello.
A la fuerza y sin previo aviso le echó de la casa de donde era la encargada desde hace casi tres años en el barrio Villa Hermosa de Villa Elisa.
Afirmó que la vecina en cuestión, Teodolina López, vive pegada a su casa. Ambas tenían orden de restricción y no podían acercarse la una a la otra.
Según mencionó a EXTRA, Teodolina supuestamente actuó en complicidad de Gladys Romero, quien se presentó con un grupo de seguidoras a acompañar el desalojo.
“(Romero) juega por nosotros, porque ella maneja la aguatera. Y si un mes o dos meses no pagamos, corta el agua de nosotros. Maneja todo el barrio a su antojo”, manifestó.
Amada contó que su carpa queda prácticamente en la calle, cerca de un arroyo, a un costado de la casa precaria de su hija.
“Mi hija está embarazada a punto de dar a luz a su segundo hijo”, aseguró.
Contó que tiene frazadas que le acercaron los vecinos para aguantar las bajas temperaturas por las noches.
“Justicia pido, si es que puedo volver a entrar, quiero que se resuelva”, indicó. Para colaborar, se pueden comunicar con ella al (0981) 233 440.
Historia del terreno
Amada no puede volver a la casa. El único documento que tiene a mano es una autorización por escribanía para vivir en esa vivienda, pero no le dejan entrar.
Explicó que la primera dueña es Gumercinda Gómez y que de su hija compró el terreno la patrona de Amada, Isabel Urunaga.
Ella fue la que le dio el poder para que viva como encargada.
Amada se dedica a vender verduras casa por casa y en el mercado. Contó que no puede ni alimentar a sus gallinas ni sus chanchos que se quedaron en la casa.