¿Quién alguna vez no quiso lanzarse a una loca aventura, pero pensando en que justamente puede ser una locura, nunca se atrevió a hacerla? Bueno, hay quienes sin pensarlo dos veces se tiran a descubrir qué puede haber detrás de una travesía. Este es el caso de dos jóvenes paraguayos, Juanqui Pane y Alberto Samaniego, que decidieron emprender el viaje de sus vidas en una “combi”, durante 185 días desde el “gigante del Norte” hasta nuestro país. Ambos fueron estudiantes que emigraron a Estados Unidos gracias a una beca.
Juanqui siguió una maestría en Ciencias Políticas en el Estado de Missouri, mientras que Alberto estudió Informática en Indiana. Cuentan que la idea primeramente era que Alberto se comprara un auto para recorrer la costa norteamericana. Esta idea fue comentada a un amigo “yanqui” que vivía con él. “Y por qué no aprovechás y te vas manejando a Paraguay, así como un chiste”, le sugirió el extranjero, recordó Alberto. Estas palabras fueron suficientes para que Alberto tomara lo que considera la mejor decisión de su vida.
La combi
Nuestro compatriota contó que, recorriendo un barrio con Juanqui en Missouri, vieron una combi estacionada. Allí contaron que querían adquirir el vehículo para llegar hasta el otro extremo. “Al señor le gustó muchísimo la idea y ahí dijo: bueno, yo les regalo la combi”, relató el joven. Agregó que siempre le preguntan cuál es el lugar que más le gustó y él siempre contesta: “no fueron los lugares, fueron las personas”.
En Cuba
Recordó una anécdota que considera la más valiosa de su travesía. Fue cuando conoció a unos campesinos cubanos en la ciudad de Trinidad. “Nos fuimos a caballo hasta el campo y ahí conocí cubanos que nunca habían hablado con un extranjero. Esa era la verdadera tierra y no la que veían los turistas”, dijo. Luego de 185 días de viaje, llegaron al país un 30 de diciembre del 2014, dando la sorpresa a todos los que no creyeron que lo lograrían.