Si mañana tenés que operarte... ¿con quién estarás mejor cuidado la noche anterior que con las personas que al otro día “meterán cuchillo” en tu cuerpo? Esto habrá pensado el protagonista de nuestra historia, pero se equivocó.
LA CENA
Según cuatro.com, todo ocurrió en Perugia, Italia. Gino Pucciarelli, un arquitecto de 48 años debía someterse por segunda vez a una sencilla operación de amígdalas, ya que después de la primera, había quedado sangrando.
Tal vez para crear un mejor ambiente de trabajo, el arquitecto, junto con la doctora que al otro día lo operaría (eran amigos) y otros dos especialistas que también participarían en la intervención, salieron a cenar y a beber.
Pero cometieron un terrible error.
SELFIE Y MUERTE
Al otro día se realizó la operación. El momento quedó inmortalizado en una selfie (¿cómo no sacarte fotos con la gente con la que anoche la pasaste tan bien?).
Sin embargo, todo salió mal: el arquitecto murió porque no se respetó el lógico ayuno preoperatorio. La intervención se complicó, provocó una hemorragia interna y acabó en un paro cardiorrespiratorio, falleciendo en la intervención.
Todos los profesionales están ahora detenidos por presunta negligencia médica.