El contralor Óscar Velázquez y la “secretaria vip”, Liz Paola Duarte, fueron imputados por la fiscal Victoria Acuña. Además corrieron la misma suerte 9 funcionarios más. La fiscal Victoria Acuña imputó al contralor Óscar Velázquez; a la subcontralora, Nancy Torreblanca, la “secretaria vip”, Liz Paola Duarte y otros 9 funcionarios más luego del escándalo desatado por los millonarios cobros que se pagaban en la Contraloría General.
Velázquez y Torreblanca están imputados por estafa en calidad de cómplices, cobro indebido de honorarios e inducción a un subordinado de un hecho punible. El juez Alcides Corbeta pedirá el desafuero del contralor. “Requerimos al Juzgado que remita la imputación a la Cámara de Diputados de manera en que resuelva el desafuero para su juicio político”, dijo la fiscal Victoria Acuña a EXTRA.
Secretaria vip
Los cargos contra Liz Paola Duarte son estafa y cobro indebido entre 2014 y 2015, aunque la funcionaria ingresó en 2008. “La pena probable por estafa son 5 años, mientras que por cobro indebido de honorarios son 3 años. Por inducción a hecho punible también son 3 años”, sostuvo Acuña.
La fiscal señaló que “la secretaria vip” tendría que devolver el dinero que percibió, unos 1.221 millones de guaraníes. “Estamos iniciando el proceso para ver cómo se haría la devolución”, explicó.
Los demás funcionarios imputados son Roberto García; Luisa Almada; Celia Cardozo; Myriam Bogado, Horacio Coelho; Eduardo Gadea; Hugo Pereira y Alicia Acevedo por el delito de cobro indebido de honorarios.
Devuelto por funcionarios
La exniñera de las hijas del senador colorado, Víctor Bogado, Gabriela Quintana, devolvió más de G. 70 millones a la Itaipú Binacional en concepto de salarios irregulares cobrados en 2013. Perla Paredes, hija de la diputada colorada Perla de Vázquez, fue condenada a dos años de cárcel, pero con suspensión de la condena por cobrar sin trabajar como médica. Tuvo que devolver G. 188 millones de un total de G. 424 millones y lo restante paga en cuotas desde julio de 2014. Los “caseros de oro” por el caso de José María Ibañez no devolvieron nada.