Una señora terminó con la cara desfigurada luego de recibir una brutal golpiza supuestamente por parte de un vecino, Wilson Arce, de aproximadamente 30 años.
Según relató la víctima, Natalia Cárdenas, ella, su hija de 19 años y su hijo menor de edad fueron el sábado pasado a la fiesta patronal en honor a Santa Rosa de Lima, en Costa Fleitas, Areguá.
La joven estaba en la pista de baile con sus amigas, cuando en un momento, Wilson se le acercó y quiso bailar con ella, pero la chica se negó. Esto le molestó al hombre, quien se puso agresivo, estironeó del brazo a la señorita y le pegó por la cabeza, según la denuncia.
“Mi hija salió afuera junto a mí y me contó lo que le pasó, entonces le dije que se quede nomás ya conmigo, que en seguida íbamos a irnos a casa. Primero le llevé a mi hijo y luego volví por ella”, relató.
Sin embargo, por el camino, se cruzaron con el agresor, quien tres cuadras antes giró sobre su moto, por lo que se quedaron tranquilas pensando que por ahí vivía. Pero estando a 100 metros de la casa, el tipo les salió de repente.
Las echó de la moto y ahí Natalia le reclamó lo que le hizo a su hija. El hombre respondió con un puñetazo e intentó agarrar a la joven, por lo que la señora le gritó a su hija que corra.
Necesita cirugía
“Ahí Wilson me pegó más, todo por la cara, me rompió la nariz, los pómulos. Yo no puedo ni respirar bien, no puedo comer nada sólido ni moverme del dolor”, contó a EXTRA.
La doña debe someterse a una cirugía, pero necesita comprar las prótesis, que cuesta G. 10.000.000. Primero fue a ver en la Dirección de Beneficencia y Ayuda Social (Diben), pero le dijeron que no tenían, por lo que pide ayuda a la gente.
Su número es el (0982) 771-850.
Dijo que quisieron robarle
Ña Natalia dijo que el jueves pasado se encontraron en la Fiscalía con el presunto agresor, quien se rió de ella en la cara.
“Él dice que le intentamos robar su moto, pero eso es mentira, él nos salió al paso y nos agredió, yo ahora no puedo ni trabajar por su culpa”, lamentó.
La señora es mamá soltera, trabaja como peluquera y también hace empanadas y postres para vender.
Actualmente, hace budines para poder recaudar fondos para comprar las prótesis que necesita con urgencia.