Imputado
Jesús Benítez quería formalizar con su novia y cortar con el funcionario.
El joven Jesús Francisco Benítez Pérez (18) supuestamente mantenía una relación con el funcionario Antonio Martínez Peña (57), degollado en la playa Ciclovía de San Bernardino. El muchacho tenía una novia y pretendía cortar con Martínez Peña, lo que habría motivado la disputa, según los investigadores.
La Fiscalía imputó a Jesús por robo agravado y homicidio doloso mientras la mamá alegaba que el joven era acosado por Martínez desde hace aproximadamente tres años y que de nada sirvió que se le pidiera dejarlo en paz. En la noche del martes último, ambos fueron en la moto hasta la playa, donde discutieron.
“Ambos se conocían y se frecuentaban mucho”, comentó el fiscal Gustavo Sosa, quien investiga el caso.
Martínez, quien era funcionario de la Municipalidad de Atyrá, solía prestar la moto al joven quien supuestamente utilizaba el vehículo para pasear con su novia. Era uno de los temas de discusión entre los dos. Tras herirlo con dos puñaladas en el cuello, llevó el celular y fue a empeñar la moto por 750.000 guaraníes, en San Lorenzo. Supuestamente, necesitaba el dinero para curarse las heridas que había sufrido en la mano durante la pelea con el funcionario.
Ayer la Fiscalía liberó a Arcadio Benítez Colmán (57), padre del joven. El mismo había sido detenido porque su teléfono fue utilizado para llamar al funcionario municipal asesinado, lo que le había complicado. Pero los testigos dijeron que esa noche se vio solo a Jesús en la ciclovía por lo que el papá quedó en libertad.
El cuerpo sin vida de Martínez Peña fue hallado el miércoles en la conocida playa de San Bernardino y a metros de su cuerpo, un arma blanca. El sospechoso detenido vivía en el barrio San Blas de Atyrá.