“No saber nada de ella es lo que más duele. Lo único que pido es poder comunicarme con mi hermana y poder contarle que su familia no le va a dar la espalda”, manifestó Carolina Duarte, hermana de Eulalia. Eulalia Duarte Estigarribia es la paraguaya sentenciada a muerte en China por un Tribunal Popular Intermedio del municipio de Shanghái, el 21 de junio de 2013, por el cargo de contrabando de droga. Por ello, se encuentra en la cárcel de mujeres de esta ciudad desde el 5 de septiembre del 2014.
“Sabemos que depende de su comportamiento para que le puedan cambiar de sentencia. Seguro que no sabe que falleció un hermano nuestro. Por eso también queremos hablar con ella”, dijo la hermana. Parte de su familia reside en una humilde vivienda ubicada en la compañía Urundey, en la ciudad de Arroyos y Esteros. Allí viven dos de sus tres hijos, Jésica y José; su madre, Dolores Estigarribia y su hermana, Carolina.
En agosto del 2012, Eulalia fue desde Arroyos y Esteros hasta Asunción para trabajar pero luego de un tiempo no se supo más nada de ella. Eulalia llegó a China como víctima de una red de trata de personas.
Esperando una respuesta
La revisión del caso tendría que haberse realizado desde el 2 de agosto en adelante. Sin embargo, en la Cancillería Nacional no existe información oficial sobre su situación. Si bien en nuestro país no existen relaciones diplomáticas con China, los familiares esperan la presencia de algún representante de la Cancillería.
“No se acercaron nunca para contarnos cómo está ella. Fui con mi primo, solo nos dijeron que estaban al tanto y que iban a ver qué hacer”, expresó la hermana. La hija mayor, Jésica, recuerda y reza por Eulalia todos los días. “Ella era madre y padre al mismo tiempo. Llegó a conocer a su nietito cuando tenía 4 meses”, expresó.