Hace 53 años llegaba a Paraguay un grupo de inmigrantes que venía esperanzado tras padecer la crisis económica en que estaba su país: Corea. Entraron a tierra guaraní los primeros 90 coreanos un 22 de abril de 1965.
“Entre ellos el único sobreviviente, que está vivo acá, es mi papá”, afirmó Gustavo Koo, presidente de la Asociación Coreana del Paraguay, quien recordó que su padre Antonio Koo (82) les contó que la travesía duró 70 días en un barco, para poder venir a esta parte del mundo.
“Corea era un país muy pobre y muchos tuvieron que salir a buscar oportunidades. Paraguay fue uno de los pocos países con el que teníamos un acuerdo. No fue una casualidad que hayan decido venir acá, tuvieron que tramitar por unos tres meses”, afirmó Koo hijo.
Añadió que al comienzo la adaptación fue difícil, principalmente porque la gente venía con un convenio de agricultura, pero no tenía experiencia con la tierra. Tampoco contaban con una profesión para ejercer.
“No fue fácil en el campo. Incluso varios de ellos tuvieron que ir migrando. Los que se quedaron se dedicaron a lo único que sabían hacer: el comercio”, expresó.
Señaló que lo único que los mantuvo fue trabajar de sol a sol. Otra dificultad con que se encontraron fue el idioma, la comida y la cultura.
“Yo soy paraguayo, nosotros ya no vamos a dejar más este país”, dijo Koo, empresario del rubro de producción de huevos. Indicó que hoy son más de 5.000 coreanos que viven en Paraguay.
