El susto de sus vidas se llevaron los chiquitos y la maestra del primer grado de la Escuela Básica N° 3.771 “General Rogelio Benítez” cuando, en pleno horario de clase, escucharon un fuerte ruido que provenía de arriba. Alzaron la mirada y se dieron cuenta de que el techo se venía abajo.
Rápidamente, la profesora sacó de allí a los pequeños, quienes se salvaron de algo que pudo haber sido peor: el cielo raso sirvió de sostén a los materiales y así se evitó una desgracia. “Gracias a Dios (la caída) no fue hasta abajo porque tenía el cielo raso. Si no, hubiéramos lamentado alguna vida”, dijo el director Derlis Aquino, en entrevista con el canal de noticias Más Encarnación.
Agregó que, según los registros, la casa de estudios fue construida por un grupo de padres hace 22 años, sin que hasta ahora se hiciese mantenimiento alguno.
Sin aulas
Consultado sobre el lugar donde darán clase ahora los chicos, dijo que será debajo de los árboles. “En caso que llueva yo les dije que se queden nomás en sus casas, ya que no tenemos dónde ponerlos”, admitió. El accidente se produjo en momentos en que el Ministerio de Educación anunció la refacción de unas 1.000 instituciones educativas del país, tras la histórica toma de colegios.
Atrincherados
A propósito, alumnos del Colegio Nacional “Capitán Marcial Ramírez”, del distrito de Carmelo Peralta (departamento de Alto Paraguay), se atrincheraron en una de las aulas para exigir la destitución del exintendente Domingo Duarte (ANR), actual director administrativo de la municipalidad local. Los estudiantes acusan al funcionario de malversar millonarios fondos provenientes del Fonacide. Las clases están suspendidas hasta tanto la intendenta Mirna Orrego remueva del cargo a su actual administrador.